Durante los primeros meses del 2021, la frontera norte del país sufrió un importante colapso a propósito del gran número de personas migrantes de ingresaron al país por pasos no habilitados. Eso hizo que Colchane, una pequeña localidad en la frontera norte del país doblara su población habitual por la llegada de más de mil personas migrantes. El pueblo tiene condiciones ambientales extremas y difícil acceso, además de falta de infraestructura y la crisis del covid, generó una grave situación en la zona.
La respuesta del gobierno de Piñera fue expulsar inmediatamente a un elevado número de personas migrantes que se encontraban en la localidad y que habían entrado al país de forma irregular por pasos no habilitados. Esto ha creado no solo la resistencia de las propias personas migrantes, sino también de la oposición y de poder judicial, debido a la arbitrariedad de la expulsión y la falta de protocolos, así como de debido proceso para su ejecución.
A todo esto, hay que sumarle la nueva ley de migraciones que promulgó Chile en abril del presente año. Mencionada ley busca, en palabras de gobierno, “ordenar la casa” poniendo más barreras de entrada a las personas que deseen migrar. La nueva ley plantea la solicitud de visas en los países de orígenes, imposibilitando la regularización migratoria una vez en el país. Sin embargo, tales políticas no disminuyen el número de personas que ingresan al país, sino mas bien las deja en mayores situaciones de vulnerabilidad.
Para más información sobre la situación en el norte de Chile, les propongo los siguientes links:
- https://www.diarioconstitucional.cl/articulos/problemas-de-debido-proceso-en-la-expulsion-administrativa-por-ingreso-clandestino-de-inmigrantes/
- https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-55950140
- https://www.ciperchile.cl/2021/04/27/nueva-ley-de-migraciones-por-que-precariza-el-trabajo-y-la-residencia-de-los-migrantes-y-puede-promover-mas-ingresos-clandestinos/